Las personas sin imaginación siempre quieren que el arte sirva para algo. Servir. Prestar un servicio. El servicio militar. Dar un lucro. No entienden que el arte es la única oportunidad que tiene el hombre de conocer la experiencia de un mundo de libertad, más allá de lo utilitario. Las utopías, al final de cuentas, son, sobre todo, obras de arte. Y las obras de arte son rebeldías.
Paulo Leminski.